martes, 13 de enero de 2015

La mujer en el Perú prehispánico

     Las crónicas nos muestran datos sobre la situación de la mujer, especialmente de las de alto rango. Otra fuente importante para entender el status de la mujer es el estudio de las mitologías andinas. En los mitos podemos distinguir dos tipos de divinidades, las divinidades masculinas y las divinidades femeninas, cada uno cumpliendo funciones específicas y distintas.
      Los dioses masculinos corresponde en su gran mayoría a los fenómenos naturales, tales como tormentas, avalanchas de piedra y lodo, movimientos sísmicos, que había que controlar a través de sacrificios y ofrendas.
     Las Huacas femeninas se asociaban con las necesidades del género humano para subsistir y alimentarse, por ejemplo: la diosa Pachamama está asociada a la tierra fecunda; la Mama Cocha representa el mar; Urpay Huachac es la diosa de los peces y aves marinas; Mama Raiguana, la responsable de repartir las plantas alimenticias a los hombres.


     En los mitos también podemos observar determinados roles asignados tanto a los varones como a las mujeres, por ejemplo en el mito de Manco Cápac, el varón tienen como tarea actividades económicas como la agricultura, la ganadería y la caza. Mama Ocllo tiene como tarea desarrollar actividades domésticas.
     Uno de los temas más relevantes es la existencia de dos arquetipos femeninos, por un lado la mujer hogareña, ocupada en las tareas de la casa, la crianza de los hijos, el cumplimiento de faenas agrícolas y textiles; por otro lado la tradición de la mujer guerrera, libre y osada que podía ejercer el mando de los ejércitos: Estos dos ejemplos están representados en Mama Ocllo y en Mama Huaco, ambas compañeras de Manco Cápac a su arribo al Cusco. Si bien Mama Ocllo era la mujer sumisa y subordinada, Mama Huaco era por el contrario una mujer aguerrida con capacidad de dirigir ejércitos. 
     Según los relatos del cronista Sarmiento de Gamboa, Mama Huaco fue la persona encargada de cumplir con el rito fundacional del Cusco, es decir, una mujer portadora de la vara fundante, símbolo de un mandato divino, capaz de penetrar la tierra. Además, Mama Huaco es mencionada como capitán de su propio ejército y uno de los cuatro jefes que tomaron posesión del futuro Cusco.
     La ferocidad de Mama Huaco queda demostrada al coger una boleadora y herir con su arma a un natural del lugar en la guerra contra los Ayarmacas. El relato dice que con un tumi le abrió el pecho, sacó los bofes y soplando con ellos espantó a los naturales que abandonaron la zona, quedando la región en poder de los incas.


tiempo después, de su establecimiento en el Cusco, los Incas se enfrentaron en varias oportunidades a los Chancas, una etnia que poblaban la región del río Pachachaca. Tanto los Incas como los Chancas tenían necesidades de expandirse territorialmente, esto llevó al estallido de la guerra entre ambas etnias.
En la guerra que se libró, encontramos en las crónicas a una mujer a la cabeza de su ejército luchando junto con los Incas. Esta mujer era una curaca llamada Chanan Curi Coca, señora de los ayllus de Chocos-Cachona. Curaca que participó activamente con sus tropas y colaboró con el triunfo de los cusqueños sobre los Chancas.


martes, 30 de julio de 2013

Panacas y Conflictos de Sucesión en el Tahuantinsuyo.

      Los enfrentamientos bélicos entre Huascar Inca y Atao Huallpa no fue un caso aislado ni un fenómeno especial en la historia del Tahuantinsuyo. Estos conflictos se producían por las pugnas entre los herederos a la Mascaypacha, a la muerte del Sapa Inca se producían estas pugnas, de mayor o menor embergadura por el control del poder político.

La guerra Civil entre Huascar y Atahualpa

      Europa tenia una costumbre de sucesión muy distinta al mundo andino. Muchos cronistas afirman que las formas de herencia indígena eran completamente diferentes. También muchas investigaciones como las de Maria Rostworowski, afirman y demuestran la existencia de sistemas diferentes entre los linajes reales y en ellas las panacas reales jugaban un papel fundamental.
      La panaca estaba integrada por la familia y la descendencia del Sapa Inca. Estas panacas veneraban al personaje del cual suponían descender. La función principal de la panaca era la de conservar la memoria y la momia de su fundador, esto podia lograrse gracias a los quipus, los cantares y las ceremonias especiales realizadas en presencia del soberano y de las momias de los antepasados incas.
      En las crónicas de Cieza de León encontramos un ejemplo de esa mezcla de religiosidad y privilegio: en la fiesta del huarachico a Inca Roca le perforaron el lóbulo de la oreja y el dolor fue tan intenso que el príncipe abandonó la multitud y se alejo de la ciudad. Sucedió una tormenta y de miedo Inca Roca agachó la cabeza y en ese momento escuchó el ruído de aguas subterráneas y esta noticia fue recibido con mucha alegría y no tardaron en construír canales hidráulicos para captar el agua. Este descubrimiento fue confirmado en sus crónicas por Sarmiento de Gamboa.


     Los linajes gozaban de una considerable autonomía, Huascar no tuvo visión política al enemistarse con estas panacas, pues, las panacas jugaban un rol importante en la administración y el la política del Estado. La elección del nuevo inca se basaba en la habilidad y la inteligencia para gobernar, entre los incas no existía la primogenitura, ni la noción europea de bastardía.
    Las crónicas demuestran que el señor principal podía elegir al que considerar más indicado para el cargo. A medida que el imperio extendió sus fronteras, las intrigas convirtieron las sucesiones en un peligro para la estabilidad del Estado. Es posible que esta amenaza de guerras civiles caracterizara cada sucesión. Por eso era importante designar al nuevo gobernante de los hijos de la Coya o piui huarmi (única mujer), no se elegía al mayor sino al hijo que mostraba ser más capaz para gobernar.
Al elegido se le entregaba la borla o insignia del poder, y a la muerte de su padre continuaba en el cargo.

jueves, 25 de julio de 2013

La Leyenda de los Hermanos Ayar

      El origen mítico de los incas estan explicados en las leyendas de Manco Cápac y la de los Hermanos Ayar quienes aparecen como personajes con poderes mágico religioso. Estas leyendas fueron recogidas por los cronistas como es el caso de Garcilazo de la Vega, Gomara, Cieza de León, Juan betanzos entre otros.


     El mito de los hermanos Ayar fue recogido de la tradición oral por Juan de Betanzos, casado con Anas Kolke, hermana de Atao Huallpa (Atahualpa). Su obra: Suma y Narración de los Incas. 

     El Cusco era un pequeño poblado cuyo señor se decía Alcaviza. A siete leguas de este pueblo había unas cuevas y de uno de ellos, Pacaritambo, salieron cuatro parejas de hermanos: Ayar Cachi y Mama Guaco; Ayar Uchu y Mama Ipacura; Ayar Auca y Mama Ragua; Ayar Manco y Mama Ocllo.

      Ayar Cachi tenía el poder de derribar cerros con su honda y sus hermanos vieron su fuerza y desconfiarn de él. Lo enviaron a traer objetos de oro de Pacaritambo y lo encerraron en la cueva. Luego de deshacerse de Ayar Cachi vivieron un tiempo en Huanacaure.
     Según Betanzos: "y al año cumplido que allí estuvieron, pareciéndoles no era cual les convenía, pasáronsse de allímedia legua más hacia el Cusco, a otra quebrada y desde encima de los cerros de esta quebrada la cual llamaban Matagua miraban el valle del Cusco y el pueblo que tenía poblado Alcaviza".

      Tras la conquista de los Alcavizas Ayar Uchu quedó covertido en un ídolo de piedra. "luego de estar en los cielos, regresó Ayar Uchu y dijo a Ayar Manco que allí se nombrase Manco Cápac. Ayar Auca, Manco Cápac fueron con las cuatro mujeres al Cusco donde los Alcavizas.
      Antes de llegar a dicho poblado se toparon con uno donde sembraba coca y ají. Fue allí donde Mama Guaco golpeó a un indio con una boleadora y matándole y abriéndole de pronto y sascóle los bofes y el corazón y a la vista de los demás del pueblo hichó los bofes soplándolos..."
     Ayar Auca se convirtió en una huaca de piedra en la Pampa del Sola o Inti Cancha. Al final quedaron Manco Cápac y las cuatro mujeres.


 

martes, 23 de julio de 2013

Orìgenes del Tahuantinsuyo

     Los orìgenes de Tahuantinsuyo se encuentra documentados por las crónicas del siglo XVII. Estos documentos demuestran que la etnía inca son originarios de la región altiplánica, de la antigua ciudad puquina de Taipicala.

     La etnìa inca era una caravana de emigrantes escapados de Taipicala, hoy cnocido como Tiahuanaco, que aporximadamente a fine del siglo de a era actual lograron zafarse y evadirse en busca de refugio en tierras ubicadas al norte de su antiguo habitat.
    A fines del siglo XII el estado de habla puquina fue asaltado e invadido por una oleada humana provenientes del sur, de Tucumàn y Coquimbo, que a su vez presionaron sobre los aymaras. Este violento e inesperado asalto tomo por sorpresa a los Taipicala, lo cierto es que el Estado de habla puquina y su capital Taipicala fueron capturados y totalmente destruìdos. Todos estos hechos ha sido corroborados por los trabajos arqueològicos realizados por Max Uhle.
     Triunfante la irrupción aymara, el grupo dirigente y dominante fue perseguido y casi integramente asesinado.  Por lo menos los líderes de la mitad de hanantaipicala fueron liqudados en su totalidad, logrando huir unicamente los Urintaipicala. Los sobrevivientes fueron dirigidos por el Sumo Sacerdote y con la finalidad de salvarse se refugiaron en el lago Mamacota o Puquinacocha. Se refugiaron en las islas considerando que era inexpugnable por su rol mágico y religiosos, allí permanecieron por un algún tiempo.

      Cuando los aymaras se consolidaron en el Collao los incas reiniciaron su marcha hacia el norte en busca de tierras para sobrevivir. Quien dirigía la caravana  era nada menos que Apo Tambo jefe de los Urintaipicala.
     De Puno prosiguó el éxodo hasta el país de los Mascas o sea la caverna de los Marascoto: Tambotoco. Manco Cápac perece haber nacido en Tambotoco Allí recobieron el nombre genérico de Apotambos.
El caudillos Manco Cápac empieza a figurar como lider en el país Masca. Estos emigrantes avanzaron acarreando consigo muchísimas costumbres e instituciones propias del sur, de Taipicala, de los Puquinas, por ejemplo la división espacial de hanan y urin.